Descripción
ENZIMAS FERMENTADAS
LACTOBACILO FERMENTADO DE LA PULPA DE CALABAZA (PROBIÓTICO)
El lactobacilo fermentado de fruta de calabaza es un activo que además de su importante capacidad exfoliante posee las propiedades de un probiótico y un gran poder hidratante.
Incluido en la fórmula de nuestro de D-Peeling permite potenciar la exfoliación en las pieles más delicadas. Actúa disolviendo las células muertas de la capa superficial de la piel (estrato córneo) y completa el mecanismo de acción exfoliante de los ácidos AHA’s. La gran diferencia respecto a otros activos es que no contiene la proteína purificada, sino el complejo intacto que permite mantener su eficacia y evitar irritaciones.
De eficacia comprobada en ensayos realizados con este activo frente a una concentración similar de ácido glicólico; 1) Incrementa un 26% la renovación celular. 2) Incrementa la viabilidad celular (células vivas y funcionales)
El lactobacilo fermentado de la fruta de calabaza es ayuda a restablecer el pH de la epidermis, restaurar la flora cutánea, evitar la proliferación de organismos patógenos y a prevenir los daños inducidos por los Rayos UV, propiedades esenciales para evitar el envejecimiento prematuro de la piel, mantener su nivel de hidratación, luchar contra el acné y la proliferación bacteriana no deseada.
5 ACIDOS AHA’s GLICÓLICO-LÁCTICO-CÍTRICO-MÁLICO-TARTÁRICO
D-Peeling contiene una combinación de 5 ácidos AHA’s que proceden del azúcar de caña, de frutas como la naranja, el limón y los arándanos y el arce azucarero. Esta mezcla de ácidos de frutas estandarizada tiene una potente capacidad exfoliante, mejora la hidratación e incrementa la producción de componentes estructurales como colágeno y glicosaminoglicanos, revierte la atrofia cutánea. En ensayos clínicos se ha demostrado la eficacia en renovación celular de un 24%.
– Ácido glicólico procedente del azúcar de caña, alcanza las capas más profundas de la piel, debido a su pequeña estructura molecular. Desintegra la cohesión de los corneocitos al nivel inferior del estrato córneo promoviendo la regeneración celular, las nuevas células se desplazan hacia la superficie y, de ese modo se eliminan las células muertas superficiales. Permite la dilatación capilar e incrementa el nivel de oxigenación y energía necesario para la eficiencia intracelular con el resultado de un incremento de colágeno la síntesis de GAG y ácido hialurónico.
– Ácido Láctico procedente de arándanos, con excelente capacidad hidratante, forma parte del NMF (factor de hidratación natural), incrementa la síntesis de GAG (que permite formar proteoglicanos unidos a las proteínas de colágeno y elastina). Es capaz de revertir condiciones atróficas en pieles maduras y envejecidas y restablece el tono de la piel.
–Ácido Cítrico procedente de la naranja y el limón, imprescindible para la producción de ATP en el ciclo de Krebs a nivel intracelular, este nucleótido (ATP) aporta a la piel la capacidad de prevenir y revertir los signos del envejecimiento. El ácido cítrico es fundamental en este ciclo aportando la energía necesaria para su metabolización a nivel mitocondrial. Este proceso contribuye a la potenciar la exfoliación de las capas más superficiales de la epidermis.
–Ácidos Málico y Tartárico, procedentes del arce azucarero, mejoran la elasticidad y el tono de la piel.
ÁCIDO SALICÍLICO
La corteza del sauce blanco (Salix alba) contiene una sustancia llamada salicina, de la cual se obtiene el ácido salicílico (de ahí su nombre derivado del latín).
El ácido salicílico es un beta-hidroxiácido con propiedades queratolíticas y antimicrobianas, lo hemos incluido en la fórmula por su capacidad de promover la descamación epidérmica a través de la ruptura de los puentes dermosómicos intercelulares y evitar la contaminación por bacterias y hongos oportunistas. Se lo considera un hidroxiácido de fundamental importancia para la mejora de la apariencia de la piel envejecida y para el tratamiento del acné.
2 EXTRACTOS FITOACTIVOS
EXTRACTO ESTANDARIZADO DE AGASTACHE MEXICANA
Activo natural estandarizado derivado de la planta Agastache Mexicana, con gran actividad antiinflamatoria (gracias a su composición rica en acacetina, tilianina y flavonoides). Interfiere en los mecanismos bioquímicos que relacionan el estrés psicológico con el deterioro de la piel: disminuye las rojeces, hidrata, devuelve la luminosidad y un tono más uniforme a la piel.
En estudios in vitro se ha demostrado que la aplicación de Agastache Mexicana consigue una inhibición de síntesis de citoquinas (proteínas precursoras de la inflamación) entre un 96% y 104%, es decir consigue bloquear totalmente los efectos del estrés en las células. Esto previene la proliferación de melanocitos, la pérdida de agua transpidérmica, la vaso-dilatación (profilaxis y tratamiento para rosáceas, psoriasis y dermatitis), rojeces y daños en las fibras colágeno.
EXTRACTO DE HAMAMELIS
La riqueza en taninos explica su acción como astringente dermatológico. Los taninos de hamamelis se unen a las proteínas y las precipitan, formando una capa protectora de la piel, convirtiendo a la hamamelis en uno de los más eficaces protectores de la piel.
Tiene función vasoprotectora, ejerciendo un efecto tónico venoso al aumentar la resistencia vascular y disminuir la permeabilidad capilar (propiedades vitamínicas P), impidiendo así la salida del líquido desde el espacio vascular al intersticial.
El extracto de hamamelis se ha evaluado experimentalmente y ha demostrado propiedades astringentes, antiflogísticas y hemostáticas unidas a una acción antioxidante con capacidad captadora de radicales libres. Tiene gran eficacia para tratar lesiones superficiales de la piel, eccemas, quemaduras, alteraciones vasculares.
ALGINATOS
Los alginatos (sodium alginato) es la sal sódica del ácido algínico, un polisacárido que se extrae de las paredes celulares de algas pardas como Fucus, Laminaria o Ascophyllum. Destacan por ser ricos en oligoelementos (ficocoloides o hidrocoloides), sales minerales, vitaminas y aminoácidos que sirven para mantener el buen aspecto externo de la piel, ya que son directamente asimilables por las células cutáneas. Por ello tiene propiedades hidratantes, emolientes (por su contenido en sustancias gelatinosas que suavizan y evitan la pérdida de agua de la epidermis), nutritivas (son muy ricas en glúcidos, minerales, vitaminas y aminoácidos), depurativas (estimulan la circulación linfática y favorecen la eliminación de toxinas), tonificantes (por su aporte de minerales y su capacidad de estimular los fibroblastos) y aumentan la elasticidad y el tono de la piel, aumentando su firmeza.
FRAGANCIA CREADA CON NOTA PRINCIPAL DE YUZU JAPONÉS
Un delicado y elegante aroma cítrico-herbal muy suave con un toque balsámico. Este perfume a base de 12 aceites esenciales contiene como nota principal el aceite esencial de Yuzu (procedente de Japón) en una pirámide olfativa con un amplio abanico de notas que dan como resultado inmediato una fragancia limpia, fresca y sutil.
12 ACEITES ESENCIALES EN SINERGIA
Creamos obras de alta perfumería natural para aportar una maravillosa fragancia a cada uno de nuestros cosméticos, siempre teniendo en cuenta nuestros objetivos principales; potenciar la eficacia del producto cosmético.
ACEITE ESENCIAL DE YUZU DE ORIGEN JAPONÉS
El Yuzu es un cítrico originario de China, que se introdujo en Japón a través de Corea durante el período de Nara. A partir de este momento, se le dio diferentes usos; medicinal, culinario y en baños termales. Es utilizado por sus propiedades terapéuticas y elegante aroma en los ONSEN (baños termales japoneses). Durante el solsticio de invierno, los japoneses se bañan en aguas termales o en baños públicos en un ritual, Yuzuyu. Sus beneficios son muchos, desde activar la circulación, disfrutar de sus propiedades medicinales, calentar y relajar el cuerpo y calmar la mente, por la noche en el momento perfecto para dormir bien, descansar y prepararse para los meses de invierno. Numerosos estudios indican las propiedades calmantes del aceite esencial del Yuzu, alivia la tensión, la ansiedad y el estrés. Su contenido en Vitamina C y otros antioxidantes le aporta propiedades antienvejecimiento.
PROPIEDADES COSMÉTICAS DE LOS ACEITES ESENCIALES
Aceite Esencial de Yuzu. Tiene importantes propiedades antimicrobianas, ayuda a eliminar las bacterias atrapadas en los poros, así como a reducir el enrojecimiento y la inflamación causada en poros infectados. También se ha demostrado que previene el daño celular e incluso puede ayudar a reparar problemas celulares anteriores. Cualidad muy interesante para pieles con problemas cutáneos, sensibles o sensibilizadas. Además actúa como un fantástico antioxidante, antiacné y blanqueador de la piel, ya que es muy rico en compuestos fenólicos, incluidos ácidos fenólicos y flavonoides.
Contribuye a la regeneración de la piel y la prevención y cuidado de hiperpigmentaciones gracias a su capacidad para inhibir la actividad de la tirosinasa y la biosíntesis de melanina, y de estimular la síntesis de pro colágeno.
Aceite esencial de Bergamota. Tiene un amplio rango de propiedades entre las que se encuentran su poder antiséptico, antibacteriano, antifúngico, antiinflamatorio y cicatrizante. Es muy útil para combatir herpes, acné, eczemas y la psoriasis.
Aceite esencial de Mandarina. Es de naturaleza cítrica, un antiséptico potente que nos ayuda a mejora enfermedades como acné, dermatitis, psoriasis, y previene su reaparición otorgándole a la piel vitaminas y minerales indispensables para mantenerla sana. Su alto contenido en Vit C hace que actúe como un potente antioxidante. Purifica la piel y la descongestiona.
Aceite esencial de Mirra. Es un aceite ideal para pieles sensibles o con patologias cutáneas como eccemas, psoriasis, etc. Es uno de los mejores activos anti-edad, favorece la regeneración de los tejidos, previene y suaviza las arrugas y ayuda a mantener la piel tersa, retrasando los efectos del envejecimiento prematuro.
Aceite esencial de Cedro. Tiene propiedades calmantes, antiinflamatorias, antifúngicas, antioxidantes e hidratantes. Ayuda a mejorar la apariencia de la piel gracias a su función limpiadora y purificadora.
Aceite esencial de cardamomo. Sobre la piel tiene un efecto revitalizante, relajante y antiinflamatorio.
Aceite esencial de Litsea Cubeba. Tiene acción antimicrobiana, astringente y antiinflamatoria.
Ideal para una limpieza profunda de la piel ya que funciona muy bien manteniendo el poro limpio y minimiza y cura los brotes de acné.
Aceite esencial de Laurel. Poder antiséptico, bactericida, circulatorio y fungicida. El aceite esencial de laurel, relaja las inflamaciones y reduce las cicatrices.
Aceite esencial de Mirto. Propiedades antisépticas, astrigentes, detoxificantes, circulatorias y estimulantes. Entre sus múltiples tributos destacamos su acción de favorecer la curación de heridas, revitalización de la piel apagada, la prevención de envejecimiento prematuro, la profilaxis de infecciones cutáneas y la acción tonificante que posee.
Aceite esencial de Hinojo. Tiene propiedades hidratantes, calmante, antimicrobianas, bactericidas, antiinflamatorias y profilácticas del envejecimiento prematuro.
El aceite esencial de Lentisco. Es ideal para aliviar algunas dolencias dermatológicas habituales, como irritaciones, dermatitis y psoriasis. Todo esto gracias a las propiedades antiinflamatorias y antisépticas.
Ayuda a la cicatrización y evita la formación de infecciones, reequilibra y regenera la piel, incluso las más sensibles gracias a sus propiedades calmantes. También es un excelente humectante, útil también en el tratamiento de pieles sensibles o irritadas.
Valoraciones
No hay valoraciones aún.